lunes, 29 de septiembre de 2008

viernes, 26 de septiembre de 2008

Los blogs de modernos


Debido a mi profesión paso muchas horas del día buscando vanguardias por la red y hoy he descubierto un blog tan modernete que se merece un comentario. Ver aquí

Entro y ¿qué me encuentro? Unas fotos colocadas ahí que se mueven solas pasando unas detrás de otras, y que si pinchas encima del botón te sale música. Hasta ahí bien.

Pero resulta que estas animaciones incorporan intencionadamente algunos efectos propios del Super8 que los nuevos soportes digitales habían solucionado, como el pelo o la mota de polvo bailando en el objetivo, los rayones producidos al rebobinar la cinta, los fotogramas chamuscados en el proyector, los empalmes mal hechos con acetona, etc..

Sí, ya lo sé. Es un efecto deseado que apela (o no) a vaguedades como la nostalgia, o lo que cada cual tenga en la cabeza en ese momento porque vale todo para todo. Tan razonable como comprar un coche nuevo y pedir en el taller que te hagan unos abollones antes de estrenarlo.

Por lo que veo, para los videoartistas de hoy el binomio cámara-computadora es una prolongación más de su cuerpo, un apéndice natural con el que están tan familiarizados como José Feliciano con su guitarra o Stevie Wonder con el Rhodes.


martes, 23 de septiembre de 2008

La Europa de los pueblos


En España conviven junto con los españoles normales 2 "pueblos" —como les gusta llamarse— o minorías sociales inadaptadas, que son los gitanos y los vascos.

Tienen muchas cosas en común que intentaré resumir aquí.


1: La delincuencia

Ambas minorías son responsables de un elevado índice de delincuencia, aunque con varios matices:

·Los gitanos se dedican mayormente al robo de todo tipo de cosas. Desde hortalizas sin recolectar hasta joyas, jamones, coches, cosas que no hacen falta, etc.. También se dedican al narcotráfico y a la cría de perros de pelea.

·Los vascos se dedican al secuestro, asesinato, extorsión, deposición de bombas, vandalismo político mediante sus responsables autonómicos, etc..


2: Su jerga

Utilizan ambas minorías para sus conversaciones unos idiomas que nadie más conoce, con lo que les ha sido más fácil mantenerse aislados a lo largo del tiempo.

·Los gitanos el calé.

·Los vascos el vascuence.


3: La endogamia

Padecen una endogamia que los hace parecidos entre ellos, aunque con las taras que la consanguineidad conlleva. Hay varias causas, pero comentaré 3 de ellas:

· En el caso de los gitanos es porque a los que no lo somos nos da recelo aparearnos con ellos, sobre todo por higiene y por que no te vayan a matar luego si dejas a una preñada. Además son algo feas y tienen esa costumbre del pañuelo.

· En el caso vasco es difícil que, tan feas ellas y tan brutos ellos puedan reproducirse fuera del entorno más allegado, casi familiar.

· Otra causa de su endogamia es que ambos "pueblos" proclaman que prefieren juntarse entre ellos, como los Borbones antiguamente. Esto es porque quieren hacernos creer que se sienten superiores.


4: Todo lo que les das les parece poco

·Los gitanos, cuando van pidiendo por las casas siempre quieren más. No les vale la ropa ni la comida. Quieren dinero, como si a los trabajadores honrados nos lo regalasen.

· Los vascos cuando van pidiendo por las instituciones siempre quieren más. No les vale ni con la independencia. Quieren el "Guernika", como si no tuviera dueños.


5: Utilizan sus despectivos para referirse a la gente normal

· Los gitanos dicen "payos".

· Los vascos dicen "estado español".


Ya para terminar...

¡A ver si van a ser primos!

sábado, 20 de septiembre de 2008

El chistoso del teletexto



Hace unos días, mirando el teletexto descubrí que el buen humor no se detiene ante barreras arquitectónicas.



martes, 16 de septiembre de 2008

Los programas de la tele


"La tele" sabemos que roba tiempo si la dejamos. Y ahora que puede, también el dinero. O eso parece que intenta.

De toda la basura que se cocina en la parrilla televisiva hay unos programas intrigantes cuya esencia es llamar para acertar una pregunta facilona. El último que pude ver (en Localia a las 7 de la tarde, por si hubiese niños viendo la tele y les apeteciera llamar) planteaba acertar la suma de los números que aparecían en la pantalla. ¿Fácil? No acertó nadie.

Se sucedían las llamadas con voces anómalas y sandeces a cual más gorda que la anterior. Por un momento llegué a pensar que se trataba de un timo, pero enseguida descarté esa posibilidad. Nuestro gobierno no lo permitiría.

Si concluímos que esos programas sin trampa ni cartón muestran la realidad sobre la aptitud de nuestra sociedad, parece que sería necesaria la intervención de Dios para que los españoles supiéramos incluso calzarnos.

Entonces, como todos sabemos calzarnos, resulta que los españoles somos el pueblo elegido por Dios. Ahora nos tendrá que decir para qué.

Amén.