Querida amiga.
No dejo de darle vueltas a lo que me contaste acerca de la versión que algunos cuentistas predican sobre los hechos que acompañaron al proyecto y “ejecución” de la más tristemente famosa central nuclear española, en Lemóniz. Después de rebuscar toda la información que me fue posible al respecto, no encontré ninguna mención a aquellas supuestas cargas a caballo causantes de aquellos supuestos muertos de los que hablabas y todo eso. Tampoco encontré desde fuentes afines al bando de los malos de mi película ninguna fotografía ni filmación que avale lo que dices que te dijeron.
Pero tanto empeño ponen practicando su victimismo (uno de los deportes favoritos de los pobladores de esa comunidad autónoma después de la caza del hombre y la cría de rehenes en cautividad y su posterior muerte) que siempre encontrarán la “solidaridad” de muchos extranjeros y algún mal español que les crea. Dejan el alma en reinventar la historia según sus conveniencias, y como aquí nadie revisa las hemerotecas, triunfan en su misión contaminadora. Esto es "el timo vasco”. No se le da mucha importancia porque no roban dinero, sino dignidad, y eso parece ser un valor que cotiza a la baja.
Consiste su timo en inventarse su propia historia, adornándola un poco, para que sean sus oyentes, extranjeros y malos españoles por norma, quienes les arroguen unos derechos y privilegios sobre los demás vecinos, que nunca les correspondieron. Lo que nunca ganaron en ningún campo de batalla lo quieren conseguir mediante la combinación de mentira y terrorismo. Me surge una enorme duda, pues las víctimas de los timos lo son de su propia codicia, por su íntima intención de aprovecharse de alguien a quien creen mermado de facultades o desorientado, pero ¿qué otra intención tienen al dejarse engañar las víctimas de estos timadores ladrones de dignidades?
Por otra parte, se paralizaron las obras que creo que seguiremos pagando durante bastantes años más, alegando una moratoria nuclear que camuflaba una verdadera cesión al chantaje terrorista, de modo que el gobierno no tuvo que asumir que habían cedido al chantaje, y la mafia local tan feliz porque se pudo poner un traje de Robin Hood, que imagino que en opinión de su pueblo devoto y gustoso rehén, no se ha quitado ni para lavarlo.
Hay personas admirables, capaces de dar charlas y coloquios a cambio de casi nada. Sólo exigen que les demos la razón. O si no... Un tiro en la nuca y a callarnos todos.
Sé buena. Chao!
No dejo de darle vueltas a lo que me contaste acerca de la versión que algunos cuentistas predican sobre los hechos que acompañaron al proyecto y “ejecución” de la más tristemente famosa central nuclear española, en Lemóniz. Después de rebuscar toda la información que me fue posible al respecto, no encontré ninguna mención a aquellas supuestas cargas a caballo causantes de aquellos supuestos muertos de los que hablabas y todo eso. Tampoco encontré desde fuentes afines al bando de los malos de mi película ninguna fotografía ni filmación que avale lo que dices que te dijeron.
Pero tanto empeño ponen practicando su victimismo (uno de los deportes favoritos de los pobladores de esa comunidad autónoma después de la caza del hombre y la cría de rehenes en cautividad y su posterior muerte) que siempre encontrarán la “solidaridad” de muchos extranjeros y algún mal español que les crea. Dejan el alma en reinventar la historia según sus conveniencias, y como aquí nadie revisa las hemerotecas, triunfan en su misión contaminadora. Esto es "el timo vasco”. No se le da mucha importancia porque no roban dinero, sino dignidad, y eso parece ser un valor que cotiza a la baja.
Consiste su timo en inventarse su propia historia, adornándola un poco, para que sean sus oyentes, extranjeros y malos españoles por norma, quienes les arroguen unos derechos y privilegios sobre los demás vecinos, que nunca les correspondieron. Lo que nunca ganaron en ningún campo de batalla lo quieren conseguir mediante la combinación de mentira y terrorismo. Me surge una enorme duda, pues las víctimas de los timos lo son de su propia codicia, por su íntima intención de aprovecharse de alguien a quien creen mermado de facultades o desorientado, pero ¿qué otra intención tienen al dejarse engañar las víctimas de estos timadores ladrones de dignidades?
Por otra parte, se paralizaron las obras que creo que seguiremos pagando durante bastantes años más, alegando una moratoria nuclear que camuflaba una verdadera cesión al chantaje terrorista, de modo que el gobierno no tuvo que asumir que habían cedido al chantaje, y la mafia local tan feliz porque se pudo poner un traje de Robin Hood, que imagino que en opinión de su pueblo devoto y gustoso rehén, no se ha quitado ni para lavarlo.
Hay personas admirables, capaces de dar charlas y coloquios a cambio de casi nada. Sólo exigen que les demos la razón. O si no... Un tiro en la nuca y a callarnos todos.
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