El código QR (Quick Response) es un código bidimensional o matriz gráfica que almacena muchísimos más datos que los códigos de barras tradicionales y permite su interpretación mediante cualquier dispositivo móvil con cámara (teléfono móvil, webcam, etc.).
Y lo más importante, ¿para qué sirven?
Pongamos un ejemplo:
Imaginemos a un ciudadano que va paseando por la calle y se encuentra con un cartel que anuncia un concierto de su agrado. El cartel incluye un código QR.
Ese código le va a permitir interactuar desde el teléfono móvil. ¿Cómo? Haciéndole una foto con la cámara que éste lleva incorporada:
En pocos segundos el teléfono descifra el contenido del código y nos muestra el resultado. En este caso es un enlace a la web de la artista, desde donde se podrá descargar una canción, ver algunos videos, y comprar las entradas para ir con unos amigos al concierto.
Nuestro héroe ha decidido ver todos los videos y se ha descargado una canción que le gustaba mucho. Además va a comprar desde el móvil 4 entradas para el concierto que dará en su ciudad. ¿Cuál es el proceso? A continuación lo explicamos mediante un esquema:
- El usuario da la orden de compra, que es enviada por su red móvil hasta el servidor donde se aloja la plataforma de venta de entradas.
- La plataforma recibe la orden y genera las entradas, que son enviadas en forma de código y mediante un MMS al usuario.
- Sin esperar colas, el usuario recibe las entradas en su terminal por MMS que le acreditarán en la puerta del concierto con tan solo acercar el teléfono al lector.
... Y si algún motivo impidiese a nuestro heroe acudir al concierto una vez recibidas las entradas, éste podría enviárselas a quien desase mediante MMS y las entradas tendrían validez, evitando la pérdida de las mismas.
En definitiva, los códigos QR son una nueva puerta de entrada en internet a través del teléfono móvil ofreciendo al usuario posibilidades ilimitadas.